Ciudad Juàrez.- Esperanza Mejía Ortega, de 83 años, originaria de Ciudad Juárez, acudió a las oficinas del Instituto Chihuahuense para la Educación de los Adultos (Ichea) en esta frontera, para presentar sus exámenes de primaria y secundaria.
Viuda desde el año 2004, es madre de siete hijos y se dedica a los quehaceres del hogar, pero dice tener una alta responsabilidad con su familia y querer ser ejemplo para que ellos no abandonen la escuela.
Ella decidió concluir sus estudios luego que el sacerdote de la iglesia a donde acude todos los domingos, invitó a quienes no tuvieran su primaria o secundaria, para que acudieran a clases en el círculo de estudios ubicado en la parroquia del Señor de la Misericordia.
Esperanza se acercó por curiosidad de saber qué eran los servicios del Ichea, y observó que había personas de mayor edad, por lo que al saber que contaba con tiempo libre tomó la decisión de obtener su certificado.
En su infancia acudió a la escuela primaria Madero, de la colonia La Chaveña en Ciudad Juárez, pero su maestra de tercer año falleció y ya no acudió más a clases; puesto que sus padres trabajaban decidió ayudar en casa y a los 14 años de edad se casó y formó su propia familia.
Gusta de leer libros, ver programas de educación y sus hijos la visitan todos los días. Ahora que ella decidió concluir sus estudios la felicitan por este avance y esperan acompañarla cuando reciba sus certificados correspondientes.
Al momento de presentar sus exámenes, comentó que no se le complicó nada, ya que las preguntas de los exámenes son relacionadas con la vida cotidiana y ya se tiene el conocimiento.
Mario Eberto Javalera Lino, director general del Ichea, dijo que la atención que se ofrece a quienes se encuentran en rezago educativo, es decir, que no saben leer y escribir o no han terminado la primaria y la secundaria, es en todos los municipios del estado y el sistema abierto con asesorías permite que cualquier día del año haya inscripciones.
Reconoció la voluntad de doña Esperanza e hizo la invitación para que quienes tengan conocidos o familiares que quieran concluir su educación básica, les hablen del instituto y sus programas gratuitos.
Para Esperanza Mejía sus planes a futuro son continuar con la preparatoria abierta “y si es posible, quiero hacer alguna carrera como Ciencias de la Comunicación… invito a las personas de edad avanzada o que no tuvieron su escuela que se decidan a estudiar, hay muchos círculos de estudios cerca de sus casas”, concluyó.
