Ciudad Juárez.- Durante este domingo, fue decomisado de manera arbitraria un vehículo a una mujer por parte de Policías Aduanales.
De acuerdo a lo informado, la afectada se negó a pagarles 40 mil pesos de “mordida”, por pasar una paca de ropa usada en el Puente Libre.
Aparentemente los elementos intentaron bajar la cantidad hasta llegar a exigirle 10 mil pesos por dejarla pasar, sin embargo, se dijo que la mujer solo pagó cincuenta por la ropa y no tenía dinero para la extorsión, por lo que tuvo que dejar su auto de modelo PT Cruiser en la garita aduanal.
La denuncia por presunta extorsion y corrección fue presentada por
Liz Santana ante la Fiscalía de Justicia, ya que se busca que los agentes involucrados sean sancionados por el hecho que fue señalado como un abuso y atropello de la autoridad aduanal.
En el lugar los agentes aseguraron estar protegidos porque reciben línea directa de la administradora Norma Yrasema Deirdré Bazán Mayagoitia.
Denuncian también favoritismos para la importación de vehículos de 2008 y anteriores
Además de la queja antes mencionada, agentes aduanales y empleados de la aduana denunciaron una serie de favoritismos dentro de la Aduana de Ciudad Juárez para la importación de todo tipo vehículos desde camiones especiales, tractocamiones y los famosos 2008 y anteriores.
De acuerdo con la inconformidad manifestada, actualmente en esta localidad solo se puede importar pagando la famosa “brecha”, mejor conocida como mordida, para que los importadores no sean molestados por la persona asignada por medio de la administradora de la aduana, ya que al cobrar estas brechas se tiene la facilidad para incrementar el cobro cada vez que le den instrucciones de recaudar más dinero.
Lo que se dice es que un hombre llamado Roberto Marroquín está a cargo de este negocio.
Se menciona que Roberto Marroquin es el operador por parte de uno de los dos grupos que manejan en la aduana de Ciudad Juárez uno de los rugros más golpeados por esta mafia, que es la importación de todo tipo de vehículos, y que a su vez asegura ser íntimo amigo de personajes que están dentro de la cúpula de poder de la llamada “Cuarta Transformación”.
Marroquín a su vez, tiene como operador o bajo su mando a Guillermo Huerta quien es muy conocido dentro del negocio de las importaciones de vehículos, ya que este estuvo al frente en Ciudad Juárez de los famosos “pules” en el tiempo de los Amparos de legalización de vehículos.
No siendo suficiente, Marroquín y Huerta le dieron el poder y exclusividad a un solo Agente Aduanal para que este llevara acabo todos los tramites de legalización de todos los vehículos 2008 y anteriores, que estos suman el 50 por ciento del volumen de importaciones en la localidad, lo cual ha molestado a los demás agentes aduanales.
La problemática que actualmente se presenta surge debido a las diferencias existentes por la lucha de los clientes y la repartición entre el grupo de Roberto Marroquín y Julio Duran, quien es el operador directo de la administradora de la Aduana de Ciudad Juárez Norma Yrasema Deirdré Bazán Mayagoitia.
Quienes conocen esta situación aseguran que Julio Duran, no ha respetado los acuerdos con Marroquín, por instrucciones que vienen directamente de la aduana local, por lo cual ahora los importadores de vehículos señalan que la administración de la Aduana de Ciudad Juárez que dirige Bazán Mayagoitia ha sido la peor y la que ha impuesto los precios más altos y la que menos ha respetado los acuerdos pactados.
Incluso, se ha informado que la misma administradora de la Aduana ha recurrido a la intimidación, al ordenar a todo su equipo de trabajo de un día para otro a que levanten “pamas” a todos los vehículos importados aún cuando estos ya estaban “cantados”, esto por las diferencias existentes entre Roberto Marroquín y Julio Duran.
Señalan que ese tipo de hechos ha provocado que los clientes salgan afectados, incluso cuando estos ya habían pagado la famosa “brecha”.
La situación tiene molestos a los agentes aduanales en esta frontera quienes piden a la autoridad solucionar esta situación y que se trabaje en erradicar los favoritismos y actos corrupción dentro de la Aduana Mexicana de Ciudad Juárez.